martes, 10 de noviembre de 2015

Prosas repetidas
Mendigos del tiempo.
He mendigado por campos de  concentración
cuando el estandarte de Hitler imponía sentimientos de represión.
He mendigado en las faldas del rey Enrique XVI , huyendo del palacio por temor
a la represalia del pueblo.
He mendigado donde Telémaco esperanzado , aguardaba a su padre .
O por quién sabe! las musas griegas revoloteaban en los jardines secretos.
Soy mendiga , mujer de cabellos enredados y libres ondas al viento.
He gemido en el lecho de los escritores bohemios y he bebido inocencias
de la cúspides iglesias de los campos.


Él .
ÉL es ausencia nocturna ,
Él se sienta en el peñasco de sus ofensas y grita un nombre que nadie oír puede ya.
Su cuerpo es un recuerdo abstracto de mis sueños extraviados ,
su esencia recorre mi alma sin dejarla jamás.
Él es de sonrisa caída y de voz dulce y tenue .
Sus párpados se entreabren imitando a los botones de rosas en estación.
Él ignora , él ignora ... ¡ignora mi silueta al costado suyo!
Somos sombras fugaces caminando en sentido inverso.
Vaguedades de la semana 1
Escrito por A
Para GP
Lunes.
He estado todo el día metida en la cama. La misma sensación de muerte y pereza. Querido mío, tres años sin verte. 
En cada hombre he buscado algo de tu sombra o algo de ti. Y por más vueltas que le doy a cada uno no logro encontrarte. ¿Por qué huyes tanto?
Resultó que yo seria la porción de vida que daría ánimos a tu experiencia; sin embargo resultaste ser tú mi especie de ilusión, y resulté  ser yo a la que habían de llenar de vida o ánimo. ¡Si me vieras! tanto ha  cambiado tu querida A.  El arte perdió su encanto igual que mis órganos el seguir funcionando. Mi estrechez con el desamparo se agranda cada día que pasa. 
Muy aparte de eso, quiero confesarte que no he vuelto a sentir emoción en el estómago desde el verano del año pasado. Y aún espero en vano sentirlo. Creo que , quizá, ya pasó mi etapa de ilusión; pero... ¿tan pronto? apenas si las tías de treinta me consideran una cría, y es que en otras palabras pues sí, lo soy.

Jueves.
Hoy puse a alto volumen el vídeo de youtube. A pesar de que los vecinos vinieron a quejarse yo no hice más que ignorarlos ¿ Por qué hacer caso a las mismas caras molestas de siempre?
 He buscado nuevas excusas para faltar al trabajo , y aún las busco para no ver a ciertos amigos. Debería abrir una empresa de excusas como la empresa de suicidios de un corto francés. Hace unos meses mientras hacía zapping en la tv vi una corto animado que trataba  de una familia que tenía un negocio familiar : El negocio del suicidio. En esta empresa los hijos , como los padres, tenía un aspecto de dejadez y miseria. Se dedicaban a ordenar las pociones de veneno y las sogas para el estrangulamiento. Mientras por la puertecilla de vidrio entraba la gente con una bolsa de dinero y pidiendo la <recomendación de la casa> . Ninguno de ellos respondía al menor estímulo. El final era uno feliz: Ellos había probado las emociones y los sentimientos, y decidieron no regresar a su antigua vida lúgubre.

Sábado.
De nuevo en casa, y hace unas veinticuatro horas de igual forma. En mi cabeza ronda la canción <en la travesía de tu ausencia> de Daniel F , y me pregunto ¿ Qué ausencia me hace sentir en un travesía tan pasible y a la vez tan insoportable? En fin. Creo que tengo para rato con el desánimo, querido GP, si estuvieras aquí no dudo que hubiera saltado  de mi cama.

Domingo (de nostalgia)

No viene a nadie a visitarme. Los amigos de antes se habrán olvidado mi nombre o mi dirección. Es tan triste no salir, ni siquiera al frente de mi casa. Contigo, GP, saldría. Nunca salí contigo pero sé que saldríamos y nos creeríamos underground. Me ayudarías a fabricar cometas en forma de cubo y hacerlas volar como linternillas. O quizá iríamos a fotografiar las casonas de antaño con una cámara polaroid creyéndonos los más hipsters posible. Pero no sucederá. Vives tan cerca y no he vuelto a verte. Y tampoco lo he intentado o si? cada vez que salgo a la calle lo he hecho. No he vuelto a recoger piedras cerca a mi mulle ni a tener pláticas de las que disfrutaba tanto, ¡tanto!
Por mi barrio ya no hay niños, todos han crecido... y yo entre ellos. Es tan silencioso el edificio de que se fueron ellas. Ellas me alegraban aunque nunca las pude comprender ni ellas a mí.
Son las cinco de la tarde y aún nadie viene. Los domingos son los peores, no lo soporto pasarlo tan sola. No hay llamadas ni mensajes, solo ausencia.
Veo el reloj , ¡avanza! el reloj es tan perezoso como yo.

Lunes.
El príncipe se comió los dulces de la hipocresía.
Y la princesa se tragó los días de diciembre.

Veo tanta mierda en la calle que el panorama apenas si es acogedor. La misma mierda de Lima, ¿Aunque sea un mierda Argentina, no?

jueves, 5 de noviembre de 2015

Dia de M , en la ciudad de L.

Ya no hay sorbos de café, ni paseos a Larcomar ni mucho menos amigos en  casa; parece que se han esfumado sin aviso, se han alejado y ni rastro aunque no los culpo pues me ha resultado indiferente.
Se han ido muchos y los que han venido no han podido llenar los agujeros vacíos que los primeros dejaron ; Ha cambiado tanto el mundo Karina! que ni tú te lo crees .Reflexionas, meditas ¡no es tu culpa! sostienes.
Mi vagina me reclama sexo, mis mejillas algo de rubor y ahí en último plano mi mente busca inocencia (cuando desapareciste?) es tan fatigoso no poder satisfacer ninguna, no intentarlo siquiera.
Pareces inundarte en una bañera , ahogándote en tu propia sangre menstrual sin poder coger la toalla y limpiarte. El amigo de siempre se fue para siempre; no volverá, quizá, a buscarme o llamarme; no volverá a robarme la comida ni a decirme <<te odio>> y sonreír.
En fin, Ya no hay sorbos de café...pues me lo ha bebido de uno solo, lo he escupido todo y he ensuciado así al mesero. Espero al novio ausente , que quiso aparecer hoy; yo no tenia prisa ni apuro en verle. Nunca tengo apuro en nada, aunque decidí que este día fuera un día alegre.
Recogí mis cosas, abadoné el lugar y no en mas de media hora estaba en las afueras de la oficina de publicidad. De ahí saldría G, cinco años y !verle de nuevo¡ cinco años en los que espere este momento. G saldría igual que sus ojos verdes de observador paranoico cuando me escudriñaba en las aulas de la clase de ingles. Mi amor casto que nadie comprendió, y que los dos solo comprendíamos. Ya tenia dieciocho años, ya podía acercarme y hablarle con las mas plena seguridad que te otorga un DNI. Y fue así.
Ese momento de verle luego de media década fue un encanto (cuando creía todo lo contrario)ideaba planes de cómo sería, qué me diría  qué pasaría después ¿cama? ¿hotel? ¡jamás! tocarle seria una violación a mi ideal, cuando su lascivia representa para mi un orgasmo de pureza, y su ardor otoñal mi deseo de juventud.
¡ha cambiado tanto el mundo, Karina! porque tu de todas maneras no lo has cambiado! a de ser que escribo en una habitación iluminada , con un amante al lado al cual no tratado sexualmente pero esa noche llegue al nirvana de sensaciones.

-Que indecisiones las mías, las contradicciones cobran facturas.